Instalar una estufa de pellets está cogiendo cada vez más fuerza e importancia entre los consumidores, llegando a ascender un 16,2 % durante el 2018. Son económicas, ofrecen gran sostenibilidad y resultan altamente eficientes.
Los pellets están fabricados con material reciclado y se queman de forma limpia, haciendo que casi no aparezca presencia de humo. Son más rentables que otros sistemas de calefacción y tendrás tu vivienda climatizada perfectamente durante todos los meses de frío.
Existe en el mercado una amplia gama de diseños diferentes adaptados a cada usuario. Podrás elegir las características de tu aparato pudiendo controlar la temperatura ambiente de tu piso o incorporando diferentes sistemas de seguridad, entre otras.
Puede que te surjan algunas dudas sobre si se puede instalar en un piso, cómo se debe realizar su instalación y cuáles son sus ventajas. A continuación daremos respuesta a las dudas más generales para que conozcas este producto alimentado por biomasa.
¿Cuál es la normativa para instalar una estufa de pellets en un piso?
La normativa recogida en RD 314/2006 del Código Técnico de la Edificación referente a la calefacción de pellets determina que la evacuación de productos de combustión de las instalaciones térmicas se debe producir por los tejados. De esta manera, se evitará el riesgo de contaminación. Debes tener claro que los gases que deriven de la combustión al quemar los pellets no pueden salir por la fachada, ni de forma horizontal ni vertical.
Si en el piso de tu vivienda tienes colocada madera u otro material inflamable, la estufa debe colocarse sobre paneles de acero o de cristal templado. Estos elementos deben tapar la base y el espacio delantero de la caldera.
Es importante que protejas, de acuerdo a la normativa de instalación vigente, las vigas o tablones de madera que estén situados sobre el producto de calor o que atraviesen los pasos de humo.
Factores a tener en cuenta para instalar calefacción por biomasa
Para poder instalar este tipo de producto es requisito indispensable que cuentes con una salida de humos que vaya por la fachada y desemboque en la cubierta, tal y como se ha mencionado anteriormente.
Para realizar este trámite es necesario disponer del permiso firmado por todos los vecinos y de comprometerse a limpiar la fachada en el caso de que los gases, producidos por la combustión, la ensucien. En algunos edificios, la salida de humos es independiente y no habría que solicitar este permiso.
Áticos o pisos superiores con calderas de biomasa
Si existe una preinstalación de salida de humos y esta está en óptimas condiciones, no es necesario que solicites permiso a la comunidad. Si no existe la salida de humos de obra, la instalación puede realizarse atravesando la terraza o saliendo a la fachada. Como en este caso se manipulan elementos comunes, sí es necesario solicitar permiso a los vecinos.
Actualmente existen diferentes campañas de compra de este tipo de estufa de biocombustibles a buen precio para reforzar la idea de que los consumidores apuesten por energías sostenibles en sus hogares.
