Si estrenas vivienda o estás a punto de mudarte, lo más seguro es que estés pensando en qué hacer con el contrato del gas. Si no tienes intención de cambiar de domicilio en los próximos meses pero te gusta tener tus gastos controlados y asegurarte de que tus tarifas están a la altura de tus exigencias, puede que quieras revisar el contrato que tienes con tu compañía de gas y tal vez buscar mejores opciones.
Para ayudarte a hacer esto, hemos preparado una guía que te ayudará a elegir la mejor tarifa.
Consejos para contratar la mejor tarifa
Tanto si se trata de una vivienda en propiedad como si es un piso alquilado, es muy recomendable saber cuánto pagarás cada mes y las distintas tarifas a las que puedes optar. El hecho de que el gas sea un servicio esencial para nuestras vidas, no quiere decir que no puedas ahorrar ni que tengas que continuar un contrato celebrado por un dueño o inquilino anterior. Además, si por algún motivo no tienes la posibilidad de cambiar de contrato, siempre seguir nuestros consejos para ahorrar en tu factura energética cambiando pequeños detalles en tu vida cotidiana.
Por eso, tomando como referencia las tendencias de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, te damos las siguientes recomendaciones:
1. Compara:
Estudia las ofertas de las diferentes compañías, sus precios y servicios. Está muy bien consultar la información oficial aportada por estas empresas, pero no te quedes sólo con eso. Consulta a tus familiares, amigos y vecinos, especialmente a aquellos que puedan tener un nivel de consumo similar al tuyo. Su experiencia te ayudará a hacer cálculos de consumo mucho más cercanos a la realidad y saber cómo responde cada proveedor ante situaciones concretas.
Con toda la información que recopiles tendrás mucho más criterio para saber qué tarifas o qué compañías te convienen más. No todo se basa en el precio, así que cuantos más puntos puedas comparar mejor podrás elegir.
2. Horarios de consumo:
Hay diferentes tarifas según los horarios en que se usa el servicio. Debes evaluar esta cuestión. Por ejemplo, si hay pocas personas en la vivienda, trabajan fuera de casa en una jornada larga y no están mucho tiempo los fines de semana, te convendría contratar una tarifa con discriminación horaria.
Por el contrario, cuanto más tiempo esté habitado el inmueble (y, por ende, mayor uso del servicio hagas), te será más conveniente contratar una tarifa normal.
Algunas de las compañías proveedoras ofrecen aplicaciones en sus sitios web que te recomiendan la tarifa más indicada para ti, consultándote por el número de comidas semanales, la cantidad de personas en la vivienda y la superficie del piso.
3. Atención a los contratos:
Previamente a contratar, es recomendable que leas atentamente las condiciones de los diferentes contratos. Especialmente, fíjate si se incluye la prestación de servicios adicionales y si existen compromisos de permanencia o penalización por la cancelación del contrato. Tendrás que valorar si estos servicios y estas condiciones se ajustan a tu situación. Hay empresas ajenas a las compañías suministradoras que puedes contratar sólo cuando lo necesites. De esta manera podrás prescindir de los servicios adicionales que no vayas a necesitar a diario.
4. Desistimiento:
Cuando el contrato se celebra fuera del establecimiento (por ejemplo, por Internet o telefónicamente) tienes 14 días para desistir de él, sin ser necesario que des alguna justificación. Además, en tal caso, el comercial está obligado a informarte de los pasos a seguir.
5. Visitas de promotores:
Es habitual que las compañías suministradoras envíen espontáneamente a sus representantes para ofrecerte nuevas condiciones de contratación. Esto es muy positivo, ya que te permite mantenerte actualizado sobre las distintas tarifas y quizá puedas conseguir reducir tus gastos fijos. Sin embargo, en estos casos no debes sentirte presionado: toma nota de la propuesta, pide una copia del contrato para leerla con calma y si te resulta conveniente, luego contacta con la compañía.
Esperamos que estos consejos te ayuden a la hora de elegir la mejor tarifa. Si crees que necesitas un nuevo contrato, no te quedes con las dudas, contacta con tu compañía.
